Para mi las auténticas consolas de Sony, legendarias, llamativas, carismáticas y al menos por mi parte robustas y longevas han sido PlayStation y PlayStation 2. Obviando sus portátiles que también fueron una auténtica maravilla.
La 3 comprada de segunda mano tampoco la voy a dejar atrás aunque lo de carismática y duradera ya como que no le otorgo esos beneplácitos, menos todavía la 4 a pesar de no conllevar ruido alguno ni deterioro en ninguno de los dos mandos de mi unidad, y de drift en ninguno de toda generación incluso algunos de segunda, aunque también los de la 3 no me cargan absolutamente ninguno ni funcionan incluso conectados.
La 5 podrá haber vendido bastante, como la 4 y anteriores generaciones, pero no me dice más que una cifra la cual siempre, en todo momento sale a relucir en todo tipo de publicación y prensa, parece que les vaya la vida en no mencionar esto cuando encima son productos con una construcción un tanto dudosa en materiales y confección de cajas, mandos particulares en su disposición de sticks y que enseguida se quedan sin carga.
Yo tuve la 5 pero en base a su (repito, gusto personal) diseño la vendí y ando a la espera de la 6 por la posible compatibilidad del catálogo de la 5 y el supuesto de la 4.
Me gusta coleccionar las generaciones de consolas aunque no me llame en absoluto la actual. Terminaré por comprar alguna aunque me espere otro tanto.
De hecho la 4 la compré en abril del pasado 2019 y a lo tonto sin ser coleccionista, vamos, pseudocoleccionista más bien tengo un número considerable de títulos para ella, como tres o cuatro de PlayStation 5 más tres que vienen de camino. Con esta 5 no es un número a tener en cuenta, pero entre tanta mísera política de la casa me han quitado las ganas de disfrute en esta consola.
En referencia a la 6 la ilusión por que aparezca es mínima, la duda es máxima en vista a su posible diseño y en cuanto a las especificaciones técnicas veremos qué prodigan y qué realmente cumplen.
Porque con un SSD sin ser laureado ni mágico de Series X qué casualidad, cuanto menos está a la par del de PlayStation 5 e incluso resulta más rápido al igual que muchas de sus restantes capacidades técnicas, y sin publicidad engañosa como la resolución a 8K, que luego encima no llega en algunos de sus títulos a los 1080p y demás que ya sabemos.
No es echar por tierra a una consola y compañía ni tampoco engrandecer a otra. Yo, seguramente muchos de nosotros queremos una consola lo suficientemente capacitada como para mover juegos que realmente sean dignos de elogio, porque en esta generación con tanta potencia y posibilidades sinceramente hay “cuatro” contados juegos que hagan merecer la compra de una consola, que encima en vez de bajar su precio lo suben.
Y aquí va por ambas caraduras.