Bueno amigos, como ya os he comentado antes que de mini-forero nada, sino más bien ya los 19 años con estas fotos habiéndome divertido por todo lo alto tanto en casa y como ya sabéis alguno de vosotros en el coche por supuesto también al trasladar mi pasión a ellos.
Este chaval vecino del piso de arriba del mío bajaba en innumerables ocasiones para echar unos buenos vicios como al Eswat, Crack Down, Gain Ground, Ghouls’n Ghosts, Spiderman y a los dos primeros Streets of Rage entre otros tantos.
Fue el principio de los primeros años del apartamento con lo que fui conociendo a otros amigos/vecinos que fueron uniéndose para echar mayores vicios todavía.
Siempre fuí el mayor de los grupos que se reunieron en casa tanto anteriormente como en la actualidad, siendo estos otros tantos que se apuntaron en principio en el salón, también como primera estancia del sentir extremo.
Ahí tenéis a uno de ellos dándole a la Lynx.
Más adelante empecé a habilitar mi habitación con una mini cadena estéreo y algunas consolas para jugar y escuchar música, por tanto de igual manera de nuevo los amigos en casa.
Aunque antes de todo esto descrito el comienzo fue por decir a los que ya conocía anteriormente que quedáramos en mi casa para ver la serie V a las 19 horas los sábados, con perro incluído.
El del centro es mi harmano, por aquella época yo tendría unos 16 años.
Tal fue el éxito desde esa gran serie de V que disfrutamos en todo su esplendor que seguimos quedando prácticamente todos los fines de semana varios amigos los viernes y otros tantos los sábados.
No sin antes yo echar unas partidas en solitario, lógicamente antes de conocer a todos.
Aquí mi querida Atari 2600 en la terraza del salón junto a mi madre.
Con el joystick que tuvo historia. Fuimos tres amigos y yo a comprarlo llevando yo encima unas 5000 pesetas al acercarse su precio a dicha cantidad.
Pues nada, quisieron atracar a mis amigos, yo al lado sin saber qué hacer ya que sacaron una navaja ¡y enfrente de una comandancia de la Guardia Civil! terminando en no suceder nada al echar a correr todos a un bar cercano, unos cinco metros en el que nos metimos.
Menudo el susto. Mirando por todas partes entramos luego a comprarlo y salir despavoridos hacia el coche.
Luego al pasar la Atari al salón venía un amigo del colegio a echar unas partidas al Combat.
Con una perrita la mar de dulce.
Por aquel entonces estaba enamorado de las calculadoras Casio con sus dígitos en color verde. En conjunto con Atari me hacían adentrarme en la era futurista y espacial soñando hasta con los amigos con los videojuegos y hasta con una invasión tipo la serie V, todavía recuerdo perfectamente ese sueño.
Y seguimos con esos inolvidables fines de semana pero en unas ocasiones yendo yo al campo de unos de mis amigos llevándolos y trayéndolos.
Fue entrar en esa casa y ver un pequeño lugar donde había una crt donde jugamos a más no poder.
En el piso superior guardaba dos pinballs.
En una de esas ocasiones nos juntamos de diez a doce amigos, pero ocho de ellos entre los que también me incluyo estuvimos dándole al Bomberman de Saturn toda la tarde de un sábdo.
Con los ojos ya reventados hasta altas horas de la noche, cenamos rápido para seguir, no podíamos parar de picarnos.
Y así hasta nuestros días, lástima que perdí unas fotos más actuales, aunque ya quedaría fuera de tema.
Sin embargo seguimos aquí dándole acampada tras acampada con el mítico Volvo.
Algunas acampadas no fueron para disfrutar del campo, sino de las portátiles o consolas de sobremesa.
Claro, entre todo el berenjenal audiófilo de la época más los leds al ritmo del nivel de la música o de los videojuegos pues ya se sabe, a seguir viciándose de lo lindo.
No se ve al estar debajo, pero el maletero albergó la Megadrive en su interior.
También algunos de los amigos de la urbanización “ejecutaban” escenas de películas.
La pequeña Panasonic de 3" en el centro del salpicadero para los juegos de la bestia negra.
Luego, en el 95 con la compra del Golf pues más de lo mismo, no podía dejar de tener videojuegos en el coche, en esta ocasión trasladadando la Megadrive del Volvo y las dos portátiles; Game Gear y Atari Lynx junto a la primera 32 bits de Sony.
Sigue siendo usada la Lynx con amor.
Otros amigos disfrutando.
La nueva generación de consolas.
Con otros amigos más preparando otra acampada y de nuevo otros vicios.
Quedaba también en otra casa de campo de otro de los amigos para vicios de fin de semana quedándome a dormir.
Y aquí la locura total en casa de uno de ellos.
Compraba semanalmente, los sábados por la mañana un juego, cuando en otras ocasiones sin saber yo de alguna novedad pues por parte de los amigos que me la hacían saber sin más a coger el coche y por la tarde a por ese juego.
Saludos.