Buenos días, soy Bit, de Barcelona.
Sonará a cliché, pero por culpa de mi hermano y padrino, llevo jugando a videojuegos desde que soy consciente de mi existencia.
En 1993 mi padrino me regaló lo que sería mi primera consola (ya había jugado previamente a la Amstrad CPC 464 con su pantalla verde) que fue una NES mientras mi hermano disfrutaba de su fabulosa SNES que no me dejaba tocar. Me la regalaron con cuatro juegos:
Little Nemo The Dream Master
Super Mario Bros. & Duck Hunt
Robocop 3
Mega Man II
A los pocos años y (convenientemente) coincidiendo con la salida de PlayStation, heredé la SNES y Mega Drive de mi hermano. Recuerdo viciar mucho al A Link to the Past en SNES, pero me gustaba muchísimo más la Mega Drive, en ella vicié a juegos como:
Aladdin
Streets of Rage
Sonic the Hedgehog
La verdad es que ese año fui algo afortunado, pues mi abuela junto a mi madre, me regalaron por mi cumpleaños una Game Boy Pocket Roja con el juego Super Mario Land.
No llegué a tocar mucho la PlayStation, pero mi vecino se quería deshacer de su Nintendo 64 para hacerse con una, así que se la intercambié. Y aquí, sobre el año 2000, empezó una etapa que gocé mucho: Conseguía juegos de Nintendo 64 por minucias, me pasaba un juego y lo intercambiaba con alguien del barrio por otro. Pude jugar a los mejores juegos de Nintendo 64 sin gastar prácticamente nada, recuerdo comprarme el Bomberman 64 y el Lylat Wars por 3€ LOS DOS JUNTOS en un Cash Converters de Sants.
Lamentablemente, en un incendio perdí todo, incluso la casa.
Pasaron los años, y mi madre logró ponerse en pie, pudo reconstruir lo que había perdido. Yo, ya no tenía ninguna consola, así que sobrevivía jugando en casa de amigos. Hasta que un día me regaló la Game Boy Advance. Automáticamente se convirtió en mi consola favorita.
Seguí la misma estrategia que en el pasado, intercambiaba juegos, compraba, vendía, etc. Me hice con una muy buena colección que finalmente acabaría vendiendo para hacerme con una PlayStation 2.
Esta fue mi última consola. Gracias a ella descubrí los Dragon Quest y me volví muy fan de la saga. Sería aproximadamente el año 2007 ya.
En 2021 quise obtener mi colección de Game Boy Advance de nuevo, pensé que con 3-10€ me haría con casi cualquier artículo, os podréis imaginar mi maldita cara cuando empecé a ver los precios. Me quedé literalmente hecho mierda. Tuve que hacer un gran esfuerzo mental para cambiar el chip. ¿Cómo cojones algo que no me costaba más de 3€, de golpe costaba 40€ y en dudosas condiciones?
Empecé a buscar en mercadillos y rastros, cada vez era más evidente que llegaba MUY TARDE. Pude hacerme con algunas “gangas” (no es el precio que mi yo del pasado habría pagado, pero era una ganga en la actualidad…) y he de admitir que pagué más de lo que me hubiera gustado por algunos artículos. Lo peor de todo es que no los quería ni con caja, sólo los cartuchos sueltos.
En cuanto llegué al punto de querer comprarme los cartuchos de The Legend of Zelda Minish Cap y Final Fantasy VI, me percaté de algo muy serio: LAS FALSIFICACIONES. Rápidamente me curtí a la hora de detectar reproducciones de Game Boy Advance, el maldito mercado de GBA ESTABA INUNDADO DE ELLAS.
A día de hoy, he logrado finalizar la colección, incluso me hice con algunos juegos que nunca tuve y siempre quise. Me sigue faltando el Final Fantasy VI, pero tarde o temprano caerá.
Sinceramente, el coleccionismo actual me resulta un poco repulsivo, me da fatiga tratar con algunos compradores/vendedores y me duele bastante que algo que fue tan bonito e importante para mi en el pasado, ahora sea una putísima mierda en comparación.
Un saludo chavales, y gracias al que se haya leído toda la turra