Yo cuando no me gustan los suelo dejar y con el tiempo los retomo. Eso si, si a la segunda sigue sin gustarme ya lo dejo por imposible.
Me pasa lo mismo con los libros, a alguno le di 5 o 6 oportunidades.
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Hubo juegos que intenté en serio que me gustaran, como el Alan Wake o el LA Noire, pero es que se centraban más en la narrativa que en ser divertidos de jugar, desde entonces aprendí a evitarlos y por eso abandoné cierta marca de consolas que me acompañó desde 1996…
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Pues a mí me encantó LA Noire, y no soy muy de juegos narrativos precisamente, pero la propuesta de ese título concretamente es realmente única. Jugarlo acompañado es muy divertido además, porque para los interrogatorios mola debatir entre 2 y, cuando aciertas porque lo has justificado con argumentos, es muy satisfactorio.
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Si un juego no me gusta, lo abandono, tengo demasiada cola pendiente como para perder el tiempo. Lo que es raro es que alguno no me guste, porque no juego nada que sepa de antemano que no me va a gustar.
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Ese es otro de los temas. Antes uno tenía dos o tres cartuchos a la vez, así que si no te gustaba demasiado alguno te lo acababas igualmente, pero ahora con la cantidad ingente de juegos que hay pues si algo no te convence tienes 218 juegos más para probar…
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De todas maneras el tiempo me ha demostrado que según el tiempo o la época ese juego que no te convencía le metes un poco y le coges el gusto, raro es el que no me guste nada ya que mi selección suele ser casi todo lo que me gusta.
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Completamente de acuerdo.
Depende del momento el juego entra o no entra. Pero según mi opinión es muy distinguible cuando un juego no te ha hecho “click” que decir “Ok, pero ahora no”.
Si no me gusta lo suficiente en teoría sí, pero si es un tostón no.
Yo acabo de votar Otros; Aunque no he llegado hasta el final del hilo, por lo que puede que alguien haya expresado ya una opinión similar.
TL;DR: Hay que confiar en el criterio propio, si te compras un juego es porque te gusta, así que, seguramente la razón para abandonarlo no esté relacionada con un aspecto del juego, sino con una mezcla entre miedo al error y rechazo a la falacia del coste invertido. Si todo apunta a que no es lo tuyo, carpetazo y al siguiente. Depende, de que depende, de según cómo se mire, todo depende
Como muchos otros por aquí, acumulo juegos, porque me gustan y desearía tener todo el mundo del tiempo para explorarlos y desvelar todo su misterio, lo cual, de nuevo para la mayoría, es imposible. Por lo tanto te presentas con una “dura” elección: ¿A qué juego ahora?
Todo un proceso de elección, que en mi caso va hasta medir cuanto tiempo me consumirá “completarlo” (entre comillas, porque yo considero llegar hasta el final predeterminado, como si fuera una Any% speedrun) y como puedo enlazarlo con otro para no saturarme con un género y/o dificultad.
Esto no me suele fallar, ya que el primer proceso de cribado (comprar) sumado al segundo (a que jugar) hace que más o menos sea a lo que más predispuesto estoy. Sin embargo, es curioso que hace tan solo dos días fuera la primera vez en muchiiiiisimo tiempo (diría desde que tengo criterio y posibilidad de elegir que es lo que quiero jugar) en el que me he planteado dejarlo, en la 2° misión del Nioh.
Nunca he sido de este estilo de juegos (siempre RPG, mayoritariamente JRPG con algún que otro shooter), gran fan de FF, me compro el Stranger of Paradise (mismo devs del Nioh, Ninja Team), el cual ya me incomodó y me sacó bastante de mi zona de confort… revelandome que ODIO ser incapaz de no poder hacer algo. Claramente, no voy tener la skill ni dedicación de un speedrunner, pero si el público en general ha podido, ¿por qué yo no? Por lo tanto, decidí probar otros “sabores” (lógicamente, si no hubiera disfrutado la primera experiencia del FF, no se hubiera dado el caso), y el Nioh se presentaba como una buena elección. Bueno, para no alargar más el testamento, me vi en la tesitura de llegar hasta el punto del Boss de la misión, pero no habiendo encontrado un punto de control cercano, lo cual me indicaba que me lo había saltado y que al palmar (99,99% de probabilidad) el primer intento del Boss, me tocaría OTRA VEZ hacer backtracking desde donde cristo perdió las chanclas hasta ahí para volver a repetir el ciclo un par de veces. Me negaba rotundamente, entre en pánico, sabía que había un save point, pero no donde, busque por internet, me quedé un buen rato sopesando que hacer… hasta que no tuve más narices que jugármela a explorar el área hasta encontrarlo (arriesgándome a que algún enemigo de mayor nivel/dificultad lo mandara todo al garete). Y me la jugué, con paciencia, con precaución, midiendo mis pasos, en tensión, enfrentándome al peligro…hasta que lo encontré. 3 intentos después del Boss y misión cumplida . Y ahí es cuando entendí que, en la línea temporal en la cuál, ante la adversidad, hubiera abandonado el juego por no intentarlo, me hubiera perdido una gran lección.
En resumen, confío en mi criterio e intento analizar que es lo que me frena, me ofusca y hace que considere el abandono, haciendome una pregunta:
¿Es por no querer darme una oportunidad de probar que puedo? Si la respuesta es afirmativa, no abandono. Si la respuesta es no, ya que las razones son otras, inherentes al propio juego, entonces al siguiente, tengo una lista larga que nunca parará de crecer y la cual nunca completaré.
Y si has llegado hasta aquí, perdón por el tocho 
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