El sistema actual de pensiones es insostenible en tanto la progresión demográfica, o más concretamente, la campana poblacional, se encuentre invertida, y además las contribuciones a dicho sistema sean progresivas, lo cual favorece que se generen contextos donde las retribuciones medias sean mayores que las contribuciones marginales. El problema concreto de España es que la productividad no ha logrado compensar este déficit y cada vez el número de pensionistas es mayor en proporción al de cotizantes, siendo que estos primeros no han generado suficiente ahorro, lo que provoca que lo que en su momento fue un superávit, hoy se haya convertido en un fortísimo déficit, ya que la capacidad inversora del estado, además de limitada, ha tenido como resultado iniciativas ruinosas y de nulos retornos. Cada pensionista es “autosuficiente” por un promedio de 12 años, y a partir de ahí, cobra del Estado. Como tú precisamente apuntas, apenas ha habido cambios demográficos, pero esto sólo es cierto en términos de crecimiento vegetativo, siendo que con una población cada vez más envejecida el problema es muy, muy grave.
Algunos apuntes extra:
- La mochila austríaca es un modelo muy concreto de ahorro público y al que yo no he hecho alusión. Únicamente mencioné la superioridad, por factibilidad, de los sistemas de capitalización frente a los de reparto.
- Su aplicación, en todo caso, obedecería a una política financiera de transición. Y creo que ese es un tema suficientemente complejo como para tratarlo aquí. Desde un punto de vista formal, los sistemas de ahorro son agnósticos para con la composición del tejido productivo de un país.
- El cómo de emplea el dinero procedente de la recaudación tributaria no me parece un debate vacío, sino que de hecho es el debate fundamental entre provisión (que no financiación) pública y privada.
La verdad es que no esperaba haber iniciado un debate de tanto calado en este foro, pero me alegra ver aportaciones tan fundamentadas como la tuya, y sobre todo, tanta educación.
Creo que lo mejor es dejarlo aquí, pero no por ninguna suerte de condescendencia, sino más bien porque creo que hay otros espacios más propicios que un foro como este para debatir estas cuestiones.
Ha sido un placer. ¡Un saludo!