Para los coleccionistas, los juegos retro en sus respectivas cajas originales son muy cotizados a día de hoy y tienen una gran demanda. Los coleccionistas son capaces de gastar enormes cantidades para poder ampliar sus colecciones. Hace unos días, un hombre de Reno del estado de Nevada encontró una copia de “Kid Icarus” en el trastero de su casa que lo acabo subastando por nada menos que por 9000 $. Pero eso no es nada en comparación con otros juegos que se subastaron a precios de escándalo.
El ejemplo más caro no es como cabría de esperar, una primera edición del Super Mario. Pero si viene del mismo fabricante: Nintendo. Se trata del cartucho “Nintendo World Championships 1990”. Los cartuchos de color gris son relativamente fáciles de encontrar, pero hubo una edición especial de tan solo 26 copias que eran de color oro.
En 2014, uno de estos cartuchos se vendió por la increíble friolera cantidad de 100’088 $ en una subasta.
A su lado parece una primera edición del Super Mario precintado una verdadera ganga. Se vendió una copia en 2017 por 30’100 $.
Creo que entonces quizás si valga la pena echar un vistazo de vez en cuando a nuestros trasteros para ver si hay algún tesoro olvidado esperándote para ser descubierto.