Aunque tal vez es un tema común, y creo que todos lo hemos podido pensar en alguna ocasión, para mi actualmente es un tema muy recurrente.
El caso es que este hobby es muy bonito, el trabajo de buscar material antiguo o actual pero limitado es como una aventura, y un subidón de adrenalina cuando encontramos ese juego codiciado. Además, la labor de salvaguardar esas piezas únicas, que forman historia y cultura de los videojuegos es otra bastante importante, creando “mini museos” en nuestras casas.
¿Pero os habéis planteado hasta cuando expandir esa colección?
Yo muchas veces.
Además de los pros que he comentado en el párrafo anterior, también hay muchos contras, al menos bajo mi punto de vista.
El coleccionismo sobre todo retro se ha vuelto más caro con el paso de los años, y es un desembolso enorme según las piezas que quieras tener. Y no sólo el dinero que cuesta, también es el espacio que se tiene para almacenar la colección. En mi caso, no me gusta acumular todo en cajas o armarios con 2 o 3 fondos, donde luego no recuerde lo que tengo en la colección. Siempre me gusta que haya un orden, porque incluso así los artículos no tienen que sufrir por estar apilados o guardados de mala forma. Es algo que para mi cobra mucha importancia.
Otro contra para mi es que este hobby es muy absorbente. Si tienes unas metas altas hay que dedicarle mucho tiempo, esfuerzo, búsqueda, negociaciones que a veces no salen bien y que pueden llegar a frustrar, etc. Vamos, nada nuevo que no sepáis. Y hoy día, que ya muchos somos “talluditos”, tenemos tantas cosas que hacer que es complicado dedicarle un porcentaje alto a nuestro hobby, y creo que hay cosas también importantes a las que dedicarle el tiempo que se merece: la familia, amigos, viajar, trabajo, jugar a los juegos adquiridos, etc. De hecho, tengo tantos juegos que es otro de los puntos por los que me planteo cerrar la colección, ya que a saber si podría jugar a todos. En mi caso no veo necesario tener tanto, es mejor tener lo que más feliz te hace. Como dice el dicho: calidad antes que cantidad.
Si tuviese el dinero que tiene el coleccionista youtuber australiano “Last Gamer”, pues seguiría invirtiendo en este bonito hobby que ya forma parte de mi. Seguiría comprando juegos, y los podría guardar en una bonita y amplia gameroom. Pero hay que ser realistas y en mi caso no puedo (y creo que tampoco quiero) tener una colección tan amplia, por lo que llevo ya tiempo pensando en esas “limitaciones” que tengo como coleccionista, y me gustaría incluso poner un colofón al tiempo que he estado coleccioniando.
Con esto no quiero decir de vender todos los juegos, ya que eso de momento no se me pasa por la cabeza, pero si poner un punto y final tal vez.
Analizando mi colección estoy altamente satisfecho con lo conseguido. ¿Que me faltan muchas cosas que todavía quiero? Por supuesto, pero como digo, está bien saber cuales son las limitaciones de cada uno, y en todo caso sacarles provecho para potenciar tus virtudes. Yo por ejemplo no he coleccionado nunca nada de AES, mi espinita, pero eso me ha hecho poder investigar e invertir en otros sistemas tal vez no tan caros, pero que también tienen juegos muy escasos y difíciles de ver.
Por tanto, a lo que comentaba en el título, he llegado a pensar en ponerle “pronto” ese merecido punto y final que mi colección se merece. No voy a hablar de tiempo porque creo que aún me quedan unas cuantas “batallas que librar”, pero tengo en mente hacer una lista, y no ser generoso con ella, para intentar cerrar los pocos títulos que de verdad tengo muchas ganas de tener, y dejar otros en el tintero, porque muy a mi pesar, debo hacer un poco de criba y seleccionar cuidadosamente lo que quiero.
Lo que sí haría es analizar bien el rumbo que toman los videojuegos actuales, porque ahí tal vez seguiría comprando alguna cosa pese a que lo “retro” o lo que ya está “desfasado” lo tuviese cerrado por así decirlo. No sé lo que durará el formato físico en los videojuegos, pero creo que mientras dure y sigan sacando juegos que merezcan la pena con las exigencias que pido (juegos buenos y completos, nada de juegos parcheados), podría seguir coleccionando algunas cosas.
Perdonad por el “tochaco” que he soltado, pero quería expresaros ésto que llevaba pensando desde hace tiempo, y quienes mejor que vosotros que me entenderíais mejor que otros amigos.
Querría saber vuestra opinión. ¿Veis un final a vuestra colección? ¿O creéis que la droga que supone también este hobby se apodera de vosotros y es difícil soltarla?