Voy a aprovechar mi estupendo insomnio para poner la review del Rey León de Megadrive. Escribir de videojuegos siempre me entretiene.
Lo cierto es que este juego es especial para mi, porque es uno de los primeros que tengo memoria de jugar, pero eso no significa que recuerde todo el juego de mi infancia, solo tenía un breve recuerdo de la primera fase -he podido confirmarlo al rejugar el juego el otro día-. Y es normal que me acordase, porque estamos ante uno de los juegos más bonitos de los 16 bits. Este juego salió en PC, Megadrive y Super Nintendo y las diferencias entre las versiones son muy pequeñas, son casi el mismo juego.
El juego comienza con una maravillosa fase de plataformas en la que controlamos a Simba en la sabana, con muchísimo colorido y sorprendiendo por la excelsa calidad de sus animaciones, me atrevería a decir que de las más realistas del género sidescroller. Solo hay dos acciones al principio, saltar y rugir, y más adelante también podemos golpear con un zarpazo.
El juego transcurre sin cinemáticas ni nada que se le parezca por fases que, a grandes rasgos, recorren los momentos clave del clásico de Disney, y lo recrean con bastante fidelidad. Interactuar con el escenario es una parte clave del juego, ya sea rompiendo muros, saltando encima de hipopótamos, cabalgando una avestruz o agarrándonos a los salientes del decorado.
Desgraciadamente, las bondades de este título rápidamente se ven empañadas por varios defectos jugables. Es un juego con una dificultad excesivamente injusta. Si bien las primeras fases son bastante disfrutables, a partir de la fase de la estampida, las cosas se ponen bastante chungas. Por no extenderme, aquí hay un artículo que lista las “17 cosas más frustrantes” de este juego, y no les falta razón en ninguna. https://www.buzzfeed.com/norbertobriceno/hakuna-matata-not
Cuando se nos acaban las continuaciones el juego nos obliga a empezar de cero, teniendo que pasar por las pantallas más difíciles otra vez. Por suerte, un truco nos permite saltar a cualquier fase desde el menú y otro truco nos da invencibilidad contra los enemigos. Aún con ésas el juego no es fácil porque puedes morir cayendo al vacío o siendo aplastado por una roca.
Es una verdadera pena que el juego esté tan poco pulido en temas como el sistema de colisiones, la IA de los enemigos o la estructura de niveles, porque se nota que hubo bastante trabajo artístico detrás. Hoy en día puede estar bien echar una partida a ciertas fases, pues es una IP que a muchos nos encanta y en algunos aspectos le hace cierta justicia, siendo el único juego notable hasta el día de hoy.