Uno de los argumentos recurrentes en la discusión físico/digital es que no tiene ya sentido coleccionar juegos físicos porque están incompletos y requieren de actualizaciones y descargas. Que en el disco no viene el juego, que es solo una clave de activación para acceder al juego. ¿Es cierto? ¿Hasta qué punto?
Pues no mucho, la verdad. La cuenta de Twitter @DoesItPlay1 empezó hace unos meses un proyecto donde se encargan de testear juegos de la presente y recién pasada generación sin ningún tipo de conexión a internet para ver si eran funcionales.
A día de hoy, y con más de 200 videojuegos analizados de Switch, PS4, One, Series X y PS5, han encontrado que más del 90% son perfectamente jugables en disco sin ninguna descarga.
Si solo contamos juegos jugables y completos (es decir, que tengan el 100% de modos y DLC que incluyan de base en disco/cartucho), el porcentaje baja pero sigue siendo más del 80%
Podéis acceder a la base de datos que están confeccionando aquí: https://docs.google.com/spreadsheets/d/1KB3dfTKMhudQD9OWVY8p0GRGvWqeblHAjsb8HsarzYU/edit?usp=sharing
Hay que notar que 200 videojuegos no es una muestra representativa, pero también que suelen testear juegos AAA, más aficionados a los parches de día 1 que los indies, por lo que se espera que el porcentaje siga siendo alto.
Por si os interesa, además, esta cuenta estuvo al pie del cañón para intentar que Sony arreglase el problema de la batería cmos (si se agotaba esa batería y ya no existían los servidores de PS4, la PS4 no podía ejecutar juegos) y recientemente se ha anunciado que Sony lo ha corregido.
Por lo tanto, si bien es cierto que el formato físico ha perdido buena parte del encanto del pasado, no es cierto que sea inservible o que sean juegos incompletos, como se ha comentado incluso a veces en este foro.